Argumento
Resumen del capítulo 18
El capítulo 18 comienza con un momento desgarrador: Jung-suh pierde la vista por completo mientras observa los últimos rayos del sol junto al mar. Al darse cuenta de que ya no puede ver, entra en pánico y comienza a gritar, siendo este un punto de quiebre en su vida.
Song-joo, avisado por Tae-hwa tras ser arrestado por falsificación de pinturas, llega a la playa para consolarla. Sin embargo, en un acto de amor y sacrificio, se hace pasar por Tae-hwa para proteger a Jung-suh del dolor de enfrentarlo directamente. Ella, creyendo que está con Tae-hwa, le confiesa sus emociones y su deseo de encontrarse con Song-joo.
Decidido a mantener la ilusión, Song-joo lleva a Jung-suh a un café, fingiendo que Tae-hwa la acompaña. Cuando cree que es momento de "irse" como Tae-hwa, se cambia de atuendo y reaparece como Song-joo. En esta nueva identidad, tiene una breve conversación con Jung-suh, quien le expresa su felicidad por estar con Tae-hwa y le pide a Song-joo que siga adelante con su vida. Dolido, Song-joo se retira a llorar fuera del café antes de regresar con ella.
En la casa, Song-joo la atiende y se esfuerza por cuidarla. Sin embargo, el dolor de ocultar sus verdaderos sentimientos se vuelve insoportable, y decide irse. Al alejarse, Jung-suh, creyendo que es Tae-hwa, le suplica que no la abandone, confesando su miedo. Song-joo, impactado y en silencio, no sabe cómo reaccionar y es en ese preciso instante que el verdadero Tae-hwa llega a la casa, para consolarla.
Tae-hwa consuela a Jung-suh con palabras de apoyo y la lleva a su habitación, donde la acomoda con cuidado. En medio de la conversación, Jung-suh vuelve a hablar de Song-joo. En un acto impulsivo, Song-joo se acerca y toma sus manos. Durante unos instantes, ella cree que es Tae-hwa, pero al tocar su rostro, descubre que en verdad: frente a ella estaba Song-joo.
Sobrecogida por esta situación, Jung-suh lo rechaza, insistiendo en que no quiere que él la vea en su estado actual. Song-joo, devastado, abandona la casa. Afuera, Tae-hwa lo sigue y le dice que es el único que realmente puede ayudar a Jung-suh. Esto impulsa a Song-joo a seguir luchando por ella.
Más tarde, Song-joo consulta al médico de Jung-suh, quien explica que su ceguera es causada por un tumor cerebral. Aunque un trasplante de córneas podría aliviarla temporalmente, su estado sigue siendo crítico. Mientras tanto, la policía avanza en la investigación de las falsificaciones, apuntando a Mi-ra como la principal responsable.
Este capítulo refleja el sacrificio, el amor incondicional y las pruebas que unen a los protagonistas en medio de la tragedia.